Desde estas líneas quiero hacer llegar mi más sincero agradecimiento a todas las personas que han colaborado y han aportado su grano de arena para hacer posible que Telde hiciera su ofrenda a la virgen del Pino, patrona de la Diócesis de Canarias y patrona de nuestra isla. Gracias a todos los trabajadores municipales que se han volcado, a la agrupación folclórica Ábora, a los componentes del cuerpo de baile de El Salitre del Faycán, a la representación de las pescadoras de Melenenara que aportaron frescura y animaron la romería, al diseñador de la carreta, Javier Martel, a los voluntarios de Protección Civil y a todos los colectivos vecinales y culturales que hicieron posible que la de Telde fuera una de las comitivas más numerosas, gracias, muchas gracias.
Esta colaboración ha sido muy valiosa. A pesar de la situación económica de la Concejalía de Festejos, hemos conseguido representar al municipio de forma muy digna sin coste. Este bregar juntos, este trabajar codo a codo es lo que sin duda sacará a la ciudad adelante.
Sin dinero ni siquiera para comprar tachas, los trabajadores municipales consiguieron construir una carreta con la que homenajear a las personas que se dedican a la agricultura y a la pesca. Han buscado soluciones y reciclado materiales para, con mucho tesón y compromiso, conseguir una alegoría que causó admiración entre los asistentes a la romería. Quiero transmitir mi reconocimiento, desde aquí, a la capacidad de trabajo y el buen hacer de todos estos empleados. Es un placer y un lujo trabajar con profesionales de este calibre, y estoy convencido de que el futuro depara muy buenas cosas para nuestro municipio.
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