ESCUCHA NUESTRO RUEGO, MADRE QUERIDA
Virgen Del Pino, Madre querida,
a ti vengo a implorarte,
pues nos hace falta tu consuelo y protección,
porque estamos indefensos,
ante la poca humanidad,
la injusticia y el dolor.
Tú sabes, Virgen querida,
que estoy agradecida a la vida,
pues tengo a mi familia, mis amigos
pero la pérdida de mi marido,
hace difícil el día a día,
pues he visto como se desvanece,
el mundo en el que vivía.
Invadió nuestro mundo,
un virus devastador,
que va eliminando vidas
y destruyendo familias a su alrededor.
Por todo esto, Virgen Del Pino,
y porque amas a tus hijos con un amor infinito
te ruego nos ayudes y nos protejas,
nos mandes tus bendiciones,
desde tu inmenso paraíso.
Y así borres de la faz de la tierra,
no sólo esa cruel pandemia,
sino esas guerras inútiles,
que están acabando con el mundo
y con toda la humanidad.
SOLY MEDINA
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