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padre bàez

La tabaiba se ha encumbrado…

…, se ha plantado en toda la isla -e islas-. La ley dicta, no tocarlas. Quien transgrede y desobedece, castigado paga caro. ¿Quién nos librará de las

tabaibas así? Caminos ya, no se pueden seguir, embullados por la devoradora tabaiba. Cabras, ya no se ven. Ovejas, tampoco. La gloria y dignidad del hombre aquí, han sido robadas por las tabaibas. El hombre aquí, está sometido a las tabaibas (no al revés, como debe ser). Las tabaibas -aquí- nos esclavizan. Nos llevan al matadero, nos tratan como a animales. Sin respeto. Las tabaibas, ocupan el puesto de los humanos. No hay quien arranque una tabaiba, y…, ¡pobre de él! Nadie se libra de atentar contra una tabaiba (o varias). Te cazan, como a conejo o paloma salvaje. A tan alto grado ha llegado la corrupción. Casi un crimen, atentar contra una maldita tabaiba (¡y pasan de cuatrillones!). La isla  -e islas- se vuelven desiertos. Se trata y es, una autentica conspiración, bien planificada. Se burlan de los campesinos. Desgraciado aquel, que toque una tabaiba. El campo, está atemorizado. Han cambiado ganados por tabaibas (¡y qué distintas las leches de amb@s!). Las tabaibas, nos rodean por todas partes; una vaca no se ve por ningún lado. Es, una derrota pura y dura. Nos tienen cercados, vigilados, controlados. Nuestras colinas y montañas, antes eran para los rebaños; ahora, para correr. Esa ha sido, la transformación del campo (ahora, para correr). Nos castigan, con cólera y con ira (sin piedad). Son, unos abusadores. Esto es, una ruina total. Nos han hundido en la pobreza y miseria (¡y esto era el paraíso terrenal!). No atienden, ni escuchan razones. Son perversos. Son arrogantes. Nos dominan y achican. Nos subyugan y aplastan. Abusan de pobres inocentes, que ningún mal hacen. Nos persiguen. Nos atrapan. Son como fieras, que desgarran. No hay culpables, pero los multan con severidad inaudita. Sin hacer daño, nos persiguen. Nos pisotean. Nadie nos defiende. Nos juzgan, sin motivo. Inocentes que son culpables. Condenan. Amenazan. Mienten. Engañan…

El Padre Báez.

Correos que estimulan a uno (¡y como este, miles!):

“…AHÍ DIO EN EL CLAVO, EXCUSA PERFECTA PARA RECAUDAR DINERALES Y MANTENER ACOJONADOS A LOS POCOS CAMPESINOS QUE QUEDAN…”

SALUDOS: A. V.

O este otro (a voleo):

“… ni para producir un gofio de gramíneas canario, ecológico, ni para eso, LO TRAEN DE GALICIA YA HECHO Y TODO..., AGRO-GENOCIDIO NATURALISTA de listillos funcionarios government, eso es todo, FOR THE TOURISM…”

Como no hay dos sin tres, que dice el dicho:

¿Qué tenemos los canarios? Si esos patriotas empresarios y comerciantes que tenemos en Canaria, en España, montan las fábricas y traen los productos de China, es lógico que tengamos los parados en Canarias, ¿Qué fábricas tenemos en Canarias? Ni fábricas ni agricultura, tenemos tabaibas, tenemos mucha malaleche, pero para jodernos entre nosotros mismos, tenemos pinos, muchos pinos y un gobierno en cada esquina, tenemos un coeficiente intelectual de limpia Water.

Etc., etc., etc…

El Padre Báez.