miércoles, 28 de mayo de 2014


Padre Baez





Mes de mayo (día 27), mes de María…
Mes de la flores, mes de la flor más hermosa…
María, con S. S. Francisco…
María en La alegría del Evangelio (Evangelii Gaudium)…
clip_image001
… 125 […]…Pienso en la fe firme de esas madres al pie
del lecho del hijo enfermo que se aferran a un rosario aunque no sepan hilvanar las proposiciones del Credo, o en tanta carga e esperanza derramada en una vela que se enciende en un humilde hogar para pedir ayuda a María, o en esas miradas de amor entrañables al Cristo crucificado…
----------------------------------------------------
Cáritas y las tabaibas…

… Cáritas, da comida y leche; las tabaibas, dan nada y leche amarga. Se protege a las tabaibas, no a los pobres. Una cabra, le da leche; las tabaibas también; la leche de las cabras, se bebe, se toma, se hace queso con ella; la de las tabaibas te dejan ciego, te envenenan, te matan. La Doctrina Social de la Iglesia, anima a la acción y a promover la cooperación; los políticos ayudan a las tabaibas. Las tabaibas solo producen bien a unos pocos que viven de las multas por no tratarlas con “caridad” o cariño, pero nada hacen por matar el hambre a los pobres; y es que la clase política no trasciende, no gusta hacer el bien a los demás, sino a ellos mismos. El cabildo se beneficia de la protección de las tabaibas, al tiempo que no es solidario con el pobre, al que se le impide comer de la tierra; ésta, la tienen entregada en su totalidad a las tabaibas. No hay un desarrollo rural o del campo, sino un beneficio particular del control absoluto del mismo, entregado a una planta dañina, y robada la tierra al campesino, al que se le castiga si intenta comer y trabajar de y en su tierra. Casi dos millones de personas, vivimos en el campo, pero no del campo. Abandonado el campo, casi dos millones de personas, viven hacinadas, concentrados en núcleos poblacionales de y en pobreza que va a más. Antes, el campo estaba en manos del campesino que trabajaba y comía; ahora en manos del cabildo, nadie come de la tierra nuestra y crece el paro, a la par que la tabaiba envenenadora extiende su poderío de hambre y muerte, sin freno. El cabildo controla la tierra, y prohíbe cualquier trabajo de agricultura, que no sea el de su ridícula y minúscula granja en bañaderos, donde ni hay eficacia ni sostenibilidad posible, sino un engañabobos con cursos y más cursos, a la par que no se aprovecha la sabiduría de los pocos ancianos agricultores y pastores que nos quedan, que pudieran transmitir la sabiduría ancestral y de siglos a puñados de jóvenes para que reciban el testigo y mantengan lo de siempre. La tierra, solo para obtener beneficios para ellos desde las multas por cualquier acción ganadera o agrícola; toda acción en el terreno, sea la que sea, toda es punible, con multas que aterran y asombran por su cuantía, y ello sin cometer delito alguno, sino el intento de sobrevivir, justo lo que tienen prohibido, con una excesiva vigilancia y tal, que nadie escapa como se arriesgue a hacer algo. Ya la economía verde, no existe en el Tabaibal. Se ha dejado la agricultura y la ganadería; no tiene cabida en la isla e islas, sino la sola tabaiba. Mientras el número de candidatos a comer de Cáritas (de la comida que los pobres -también- creyentes practicantes depositan en las sacristías de los templos católicos, cuando vienen a la celebraciones de las Misas)…

El Padre Báez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario