miércoles, 2 de mayo de 2012

Una charla que terminó en coloquio vecinal a cargo de D. Luis A. López Sosa.

Una charla que terminó en coloquio vecinal


      
Paz Monzón

  Con motivo de la celebración de los actos conmemorativos de las FIESTAS DE LA SANTA CRUZ 2012, en el barrio de Montañeta del Calero, se inició la programación de los mismos el pasado Jueves, día 26 de los corrientes, a las 20:00 horas, con una “Charla sobre la Historia del nombre de nuestras calles e inicios vecinales”, la cual corrió a cargo de D. Luis A. López Sosa.

         Se dio inicio puntualmente el acto el cual fue presentado por el vicepresidente de la A.V. Valdemonte, D. Francisco Javier Pérez Suárez, quien presentó una breve biografía del ponente.AQUI TUS FOTOS

         El Sr. López Sosa, antes de iniciar su intervención, invitó a los presentes a que se acercaran más a la mesa, ya que, pretendía convertir el acto en una charla-coloquio, a fin de que fuera más amena y entrañable. Dividió previamente su intervención en cuatro bloques, tras los cuales intervenían los asistentes haciendo comentarios o realizando preguntas sobre la temática tratada, las cuales eran debidamente contestadas por D. Luis A. López.

         El primer bloque basculó entre la definición de la toponimia y la antroponimia, así como, la reglamentación reguladora de los expedientes destinados a la nominación de viales o lugares de dominio público, la cual fuera aprobada por el Ayuntamiento Pleno en sesión de 12 de noviembre de 1993 y que recientemente va a ser modificada y adaptada a la actual Ley de Procedimiento Administrativo.

         El segundo bloque trató sobre los orígenes del barrio con la nominación de Valderrama, en virtud del apellido del entonces propietario de la gran finca que existía en el lugar el Sr. Valderrama Palomeque, haciendo una escueta biografía de este personaje. Posteriormente, se adujo la división del sector en Casas Nuevas, El Calero y más tarde la Montañeta del Calero, haciendo el ponente una reseña histórica sobre los antecedentes de ambos lugares desde mediados del siglo pasado hasta nuestros días.

         El tercero bloque se refirió a las nominaciones de las calles del barrio, en su mayoría alegóricas a personajes de la época prehispánica e incluso de aquellos que intervinieron en la conquista de la isla. Se hizo una breve reseña histórica de hechos narrados en las crónicas existentes al respecto, al objeto de que los presentes se situaran en el contexto histórico de la época.

         El cuarto y último bloque fue dirigido al movimiento de los colectivos vecinales, la labor que éstos debieran desempeñar frente a la Administración Municipal, el rescate de los valores personales, la necesidad de concienciar a las nuevas generaciones en el respeto y la conservación de los bienes públicos del barrio y las dotes de buena convivencia, así como, la necesidad de practicar un inconformismo reivindicativo en función a los derechos de la colectividad, sin perder de vista en ningún momento la observación y el cumplimiento de las normas de respeto y consideración a la diversidad de criterios, los cuales en todo momento pueden fundamentar un debate y la votación de la opción más favorable a los intereses de la mayoría, pero que en ningún caso podrían ser el motivo de la discordia o la descalificación, ya que, ambas nos alejarían de la meta final que es la conservación y el fomento de las señas de identidad y la convivencia optima vecinal.

         El ponente, con socarronería y humor, fue contestando cada una de las preguntas que se le hicieron en los diferentes bloques y, el acto que se había proyectado con una duración de 1:30 horas, se inició a las 20:00 horas y se dio por finalizado a las 22:30 horas, en un ambiente ameno y distendido. Fue una charla-coloquio muy bien llevada y bastante enriquecedora, como así se reconoció al final por los asistentes que manifestaban percibir la sensación de algo muy agradable y familiar.

         Tal vez las personas que comparten lo que saben y lo que han podido averiguar con su dedicación personal, sean los verdaderos transmisores de la cultura, del amor a lo nuestro, a nuestras cosas, a nuestra tierra, a nuestra gente y así consigan consolidar las señas de identidad de un pueblo.

         Luis A. López Sosa, finalizó invitando a los vecinos a seguir adelante en la lucha reivindicativa de sus derechos colectivos y aludió a una frase del andaluz Antonio Machado…”Caminante no hay camino, se hace camino al andar” y finalmente aludió a la necesidad de alzar la voz para mostrar el descontento o solicitar lo que en justicia pudiera corresponder y, en este caso, refirió una frase del argentino Horacio Guarany… “Si se calla el cantor, calla la vida”.

Paz Monzón
        

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