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Telde.- “Jinámar siempre ha destacada por ser un pueblo que acogía con cariño a la gente que venía a vivir y a trabajar aquí”. Con estas palabras, el pregonero de las fiestas de la caña dulce y la Concepción, Lorenzo Esma, licenciado en Ciencias Empresarias y director del CC El Mirador, quiso esta noche poner en valor el carácter solidario de los jinámeros.
Natural y criado en la zona, Esma resaltó que Jinámar acogió primero a la gente procedente del campo y luego dio cobijo a miles de personas con la construcción de la urbanización residencial de promoción pública conocida primero como polígono y más tarde como Valle de Jinámar.
“Trabajadores y solidarios, esos eran atributos de cualquier jinamero”, destacó el pregonero, hijo de Pepito el árabe, de origen palestino, y Lorencita, a los que homenajeó en la primera parte del texto que leyó en la Iglesia de la Concepción a escasos metros de la imagen de la venerada virgen.
Esma hizo un viaje al pasado para conmemorar las fiestas de su infancia. Así evocó “los olores a pejines asados, del cantineo de la tómbola que sorteaba la chochona y el perro piloto o de señor que con un micrófono colgado al cuello vendía cuadros y figuritas de cisnes, de ciervos y otros animalitos que iba sacando de cajas marrones subido en parte trasera de un camión”.
“Del día grande de la fiesta recuerdo a mi madre haciendo de comer en cantidades industriales porque bajaban desde el campo familiares y amigos a la fiesta. Carne cochino, papas arrugás, mojo...como olía esa cocina. Lorencita siempre amable y servicial no se quejaba nunca por mucho trabajo que le supusiese”, evocó el pregonero, quien también sacó del baúl de los recuerdos imborrables la feria del ganado que, sostuvo, “con el paso de los años vas valorando más y a donde ahora me veo llevando a mis hijas y diciéndole las mismas bromas sobre las ubres de las cabras que me decía mi padre a mí”.
Esma dejó la ultima parte del pregón para referirse al futuro de Jinámar y cómo ha sido el tránsito de de un pueblo pequeño y agrícola a un barrio grande con zonas industriales y comerciales de primer orden que “lo empujan a ser un actor importante” en la isla, “un pueblo a medio camino entre Telde y capital, con una estratégica situación. Al respecto, apeló al papel “fundamental” de la educación para el avance social. Pidió que se trate con especial esmero este aspecto para que las desigualdades de antaño no se repitan y todos tengan las mismas oportunidades. Un solo abandono escolar es un fracaso del conjunto de una sociedad y de sus responsables y no se deben escatimar esfuerzos en impulsar las medidas que sean precisas para que ningún niño de Jinámar se quede sin una educación de calidad”.
Esma aprovechó este momento para rendir un homenaje especial a los maestros y profesores que guiaron a su generación. “Fueron pieza clave para este pueblo”, apuntó mencionando con nombres y apellidos a los docentes Pedro Galván, Joaquín Nieto, Paco Reyes y “a otros tantos buenos maestros y profesores que pasaron por nuestros colegios e institutos por llevar su vocación tan lejos y contribuir a la mejoría de este pueblo”.
Por último, Esma valoró que Jinámar fue siempre cuna de buenos deportistas de distintas disciplinas y felicitó al Patronato de Fiestas por su 25 aniversario y animó a sus componentes para que “sigan trabajando por este pueblo y por su gente”.
Actuación del coro infantil Derque
Tras el pregón actuó el coro infantil Derque que dirige Gustavo Sarmiento. La agrupación perteneciente a la Escuela Municipal de Folclore puso la nota musical al evento con el que arrancan las fiestas de Jinámar. Derque estrenará parte de su nuevo espectáculo que ofrecerá el próximo 22 de diciembre en la Biblioteca Arnao de Telde a las 20.00 horas.
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